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Collar isabelino: conocé más del cono para perros y gatos
Con PURINA® descubrí la importancia del collar isabelino, también conocido como "cono para perros y gatos", en la salud y recuperación de tus mascotas.
El collar isabelino, tiene diversos nombres, y es también conocido como “cono para perros” (o para gatos), “collar de recuperación” o, incluso, “cono de la vergüenza”. Se trata de un elemento protector para animales de compañía, generalmente de plástico suave, que se le pone en el cuello a la mascota para prevenir que pueda lastimarse a sí misma, consecuencia de la incomodidad.
Es posible que, en algunas ocasiones, después de una visita al veterinario, tu amada mascota regrese a casa con un cono plástico en el cuello, dándole un aspecto similar al de una lámpara.
Aunque parezca que hace pasar por un mal rato a tu amigo de cuatro patas, es seguro que ese llamativo cono alrededor de su cuello le fuera colocado por el veterinario. Esto significa que está ahí por una razón importante, motivo por el cual no deberías intentar retirarlo.
Suele ser muy conocido, sin embargo, con PURINA® te orientaremos un poco más acerca del collar isabelino, de dónde viene, cuáles son sus funciones y lo que debés saber sobre este peculiar objeto, pensado para dar bienestar a los animales de compañía.
Origen del cono para perros y gatos
En 1962, Frank L. Johnson tuvo la idea de atar una delgada lámina plástica alrededor del cuello de su perro, con el fin de evitar que el animal se lastimase a sí mismo, alargando su recuperación.
Se conocen como collares isabelinos debido a que, en el pasado, durante el gobierno de la reina Isabel I de Inglaterra, en el siglo XVI, la moda incluía el uso de cuellos altos llamados “gorgueras”. Estos accesorios contaban con un aspecto al que, hoy en día, se asemeja el cono que rodea el cuello de tu amigo de cuatro patas.
Aunque cuenta con propósitos veterinarios, también se le conoce como “cono de la vergüenza” debido a que, según algunas personas, este elemento parece un castigo para los animales, en lugar de un instrumento médico.
¿Cuál es la principal función del collar isabelino?
La utilidad principal del collar isabelino es la de impedir que tu perro o gato se rasque, lama o muerda alguna zona de su cuerpo, ya sea que haya sido sometido a una operación de manera reciente y de la cual aún tenga puntadas, o una infección o irritación en la cabeza que podría tentarlo a rascarse y lastimarse.
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Sin embargo, es clave que tengás en cuenta que, al ser colocado por un veterinario, estará pensado y ajustado de modo que pueda realizar sus comidas sin ningún problema y, técnicamente, continuar con su vida con bastante normalidad, sin mayor riesgo para tu compañero peludo.
Lo anterior significa que, aunque quizás tengás la tentación de quitar el cono para que pueda beber agua o porque creés que lo está lastimando, deberás dejarlo en su cuello hasta que sane o su veterinario lo indique.
Por otro lado, como es de esperarse, estos conos tienen un propósito que los animales no comprenden, razón por la que les pueden resultar incómodos. Esto, en consecuencia, hace que la probabilidad de que intenten retirárselos sea alta.
En caso tal de que lo logren, contactá a tu veterinario de confianza, para que vuelva a instalarlo y, mientras tanto, permanecé atento para que tu perro o gato no haga, justamente, lo que el collar isabelino le impedía.
Debés tener en cuenta que, en caso de ser retirado sin el aval del médico veterinario, en lugar de ayudar a tu amigo de cuatro patas, podrías perjudicarlo sin necesidad, lo que prolongará la recuperación del padecimiento por el que fue atendido en un inicio.
¿Cómo amenizar el uso del collar isabelino en mi mascota?
Como hemos mencionado previamente, este elemento es una medida contemplada con el único fin de brindarle bienestar a los animales de compañía, no obstante, eso no significa que ellos lo vean de la misma manera.
Al portar un collar isabelino, un elemento extraño para tu mascota, es posible que haya momentos en los que su ánimo puede decaer o quizá muestre signos de estrés o ansiedad, e incluso podría mostrarse temerosa, agresiva o deje de comer.
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Estos comportamientos pueden entenderse como reacciones normales por su incomodidad, hasta cierto punto, por lo que, si notás que los cambios son muy evidentes, o que la situación se está saliendo de control, no dudés en hacer otra visita al veterinario.
Recomendaciones adicionales sobre el collar isabelino
Este recurso médico existe con el propósito de salvaguardar la integridad de tu mascota, y para evitar que pueda herirse a sí misma, bien sea por incomodidad, estrés, o la presencia de lesiones por parásitos como pulgas o garrapatas en perros.
Por tanto, dejá que sea el veterinario quien sugiera su uso y, de paso, sea quien lo coloque, con el fin de garantizar que sea ubicado adecuadamente, sin mencionar el hecho de evitar lastimar a nuestros amigos de cuatro patas.
Cabe destacar que utilizar el cono para gatos, aunque es semejante a su uso destinado a perros, en los michis debe ser colocado con mayor cuidado y, preferiblemente, en caso de tratarse de una medida postquirúrgica, bajo efectos aún de la anestesia.
Lo anterior se debe, principalmente, a la gran agilidad y flexibilidad con que cuentan los felinos, lo que hará que desprenderse del artefacto sea menos complejo para ellos, en comparación con los canes, en especial si no es el profesional médico quien lo pone. Por eso, reiteramos, dejá siempre que sea el veterinario el encargado de colocarlo.
Tu cariño y motivación serán las mejores ayudas que podés darle a tu gato o perro en estos casos. Dependiendo de su estado, jugar con él le ayudará a no pensar únicamente en acabar con la incomodidad que le produce el cono.
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También, con el fin de garantizar su bienestar, en el momento en que el veterinario instale el collar isabelino en el cuello de tu mascota, podés revisar que no esté demasiado apretado: eso te dejará con más tranquilidad, y así podrás transmitírsela a tu animal de compañía.
Ante estas situaciones, sobre todo si es la primera vez en las que tienen lugar, lo mejor siempre es brindarle tu comprensión y compañía para que tu mascota se recupere lo más pronto posible y pueda volver a ser un perro o gato libre.
Si tenés dudas, recordá que siempre tenés que estar en contacto con tu veterinario de confianza, pues es quien cuenta con el conocimiento y experiencia necesarios para verificar que todo lo que tiene que ver con tu compañero va a ser en su beneficio.
Con PURINA® dale lo mejor a tu amigo de cuatro patas, porque tu mascota es nuestra pasión.
FUENTES:
https://iloveveterinary.com/es/blog/historia-del-collar-isabelino/
https://humanimals.mx/blog/que-es-un-collar-isabelino-y-para-que-sirve
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